La princesa inicio la alimentación complementaria a principios de diciembre. Desde antes que naciera ya habíamos decidido practicar baby led weaning (Blw o alimentación guiada por el bebé) así que me tomé los primeros seis meses en compartir información con la familia y convencer al papá geek de que este era el método para ella.
Primero leímos el libro “El niño ya come solo” de Rapley y nos termino por convencer de hacer BLW; en este método se le ofrece al bebé alimentos en trozos y no las tradicionales papillas, se busca que el niño lleve control de su alimentación a la par que se le introduce a la alimentación de la familia.
El mes previo a iniciar, yo tenía muchas dudas, principalmente porque había llegado un momento de estancamiento en su curva de crecimiento llegando a ubicarse en los primeros percentiles. Con la cabeza llena de duda conocí por Instagram a la Dra. Mafer experta en Gastroenterología y Nutrición Pediátrica (que meses después se convertiría en nuestra doctora por el tema de la baja velocidad de crecimiento) y sentí que todas las piezas del rompecabezas hacían clic cuando la escuche hablar del método bliss y el plato con los cinco grupos de alimentos. En este método prestamos mayor cuidado en los alimentos que se ofrecen al niño y se le deja experimentar con su alimentación pero también aseguramos su nutrición apoyando con la cuchara.
Mi intención era que la princesa tuviera un plato con los cinco grupos (Frutas, cereal, grasas buenas, proteínas y verduras) cada tiempo de comida, así que inicié introduciendo un alimento nuevo cada tres días, hasta que por fin después de un par de semanas tuvimos nuestro primer plato con los cinco grupos. Al principio se veían platos muy iguales pero poco a poco se van introduciendo alimentos e incrementado la variedad. Este fue su menú en las primeras semanas:
Este fue el orden de introducción de alimentos hasta el día de hoy, siguiendo la regla de un alimento nuevo cada tres días (aunque en un par de nuevos alimentos lo hice cada dos días al ser poco alergénicos.
Así se veían algunos de los platos de la princesa en este bimestre (después de que alcanzamos el plato con los cinco grupos):
Una de las principales advertencias al iniciar la alimentación complementaria es que es normal que el niño juegue con los alimentos, en lugar de comerlos, pero en nuestro caso, la princesa empezó a comerlos de inmediato. En estos dos meses, ha tenido algunos días sin apetito, y nuestra postura ha sido tomarlo con tranquilidad y no obligarla a comer si ella no lo desea. Esto respetando que ella puede tomar control de su alimentación.
Hemos tenido control sobre la presentación de los alimentos, lo que ha evitado que haya complicaciones al momento de comerlos. En un par de ocasiones ha metido más a su boca de lo que puede gestionar, provocándose arcadas, pero ella ha podido controlar el momento sin intervención de nuestra parte (siempre hemos estado muy al pendiente de ella y su entorno, listos para actuar si es necesario pero dejando que ella aprenda a hacerlo sola).
Mi intención al mostrar estos calendarios, como siempre, es sólo compartir mi experiencia con la princesa, entendiendo que no es la única estrategia y que cada mamá, papá y bebé son diferentes y existen diferentes caminos para cada meta.
Durante el período de 6 a 24 meses guarde todos los platos de princess Lía en Instagram, te invito a darte una vuelta por allá: